San Juan, Puerto Rico - 22 de diciembre de 2010 - La Secretaria de Asuntos de la Mujer del Partido Independentista Puertorriqueño (PIP), Edda López, se expresó complacido ante el anuncio de la renuncia de la Procuradora de la Mujer, Yvonne Feliciano.
"De esta forma se valida las denuncias hecha por el PIP sobre el pobre desempeño de la Procuradora en atender adecuadamente los problemas de la mujer puertorriqueña, en particular la alarmante cifra de violencia doméstica en el país. Ante esta situación la Procuradora había dejado sin participación a organizaciones no gubernamentales que por décadas han luchado contra el maltrato doméstico a través de propuestas enfocadas en la prevención, protección, y albergue que reconocen la violencia doméstica como parte de un problema que envuelve un manejo salubrista." expresó López.
"Falló, además, al intentar justificar las gestiones de las agencias de esta administración luego de cada asesinato de una mujer. Hemos atestiguado cómo la Procuradora recuenta las fechas encontradas en los expedientes de cada mujer y los trámites realizados hasta el momento del asesinato. Así hemos escuchado detalles que, lejos de develar que la gestión gubernamental está rindiendo frutos a la hora de proteger a la víctima y sus hijos e hijas, la Procuradora concluye sus declaraciones advirtiendo a la mujer que busque ayuda."
La Secretaria de la Mujer del PIP, añadió que con esta acción la Procuradora demostró desconocer que su rol, lejos de evadir las responsabilidades que por ley recaen en su oficina, es viabilizar la equidad del género más allá de recopilar datos que ya no le podrán devolver la vida a esa mujer víctima de otro feminicidio, engrosando así estas dolorosas e inaceptables estadísticas.
La líder independentista exhortó al Gobernador a nombrar una persona que sea capaz de implementar una política pública basada en las luchas de equidad de género en Puerto Rico. Así mismo, es imperativo la integración de la Oficina de la Procuradora de la Mujer con el Departamento de Educación, para cumplir con la Ley 8 del 2006 que requiere una educación basada en los principios de equidad de género.
"El Gobernador tiene la oportunidad de enmendar el error de haber nombrado una persona que lejos de adelantar la lucha por la equidad de la mujer, sentenció al silencio todas las gestiones necesarias para atender este mal social, vergonzosamente tolerado por esta administración" concluyó López.
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