PUERTO RICO
Semana de controversia y escándalos
Caso de Tito Kayak involucrado en pelea doméstica es uno de ellos
JESÚS DÁVILA
SAN JUAN/CORRESPONSAL EDLP
– El caso de la pelea en que se involucraron los famosos activistas ambientales Alberto de Jesús –Tito Kayak- e Indira Marrón –Gaya- es uno más de una serie de golpes a la moral de lucha que recibieron diversos bandos políticos nacionales durante una semana plagada de controversias y escándalos.
De Jesús tendrá que responder el 28 de los corrientes por una querella de violencia doméstica que Marrón presentó en su contra luego de un confuso incidente violento en el que participaron varias personas en el campamento de Amigos del Mar que tiene detenido un proyecto hotelero en la zona playera de Carolina.
Se trata de un baño de agua fría al movimiento ambiental, que lleva ya varios años abriendo frentes de lucha que han logrado contener el avance de la agenda para convertir a Puerto Rico en una isla-ciudad como Singapur. Para ese movimiento, de Jesús es una especie de leyenda viva, que inició los campamentos de desobediencia civil en Vieques, logró escalar la Estatua de la Libertad, una torre de vigía en Palestina y un puente gigantesco en la zona del Canal de Panamá, entre muchas otras arriesgadas peripecias.
Luego de haber sido arrestado y encarcelado varias veces por su lucha ambiental, ahora se enfrenta a la posibilidad de una sentencia por un asunto pasional privado.
Pero su caso estuvo lejos de acaparar la atención del país debido a las muchas polémicas que han tenido gran impacto. De esas, al cierre de la semana una de las más graves era la del empresario José González Freyre, uno de los acusados en el Tribunal de Distrito de Estados Unidos junto con el Gobernador, Aníbal Acevedo Vilá, por presunta corrupción con fondos políticos.
Asediado por una pesquisa sobre supuestas prácticas monopolísticas comisión legislativa presidida por el senador anexionista independiente Orlando Parga, el empresario –que controla el mercado nacional de arroz- suspendió la entrega de esa comida para cerca de medio millón de estudiantes del sistema escolar público. El senador Parga pidió públicamente al Gobierno que hiciera cumplir la ley, pero hasta ayer el aliado político del Gobernador autonomista parecía tener abierto su campo de acción a pesar de la alarma pública.
El movimiento anexionista, por su parte, también fue blanco de golpes.
Por un lado, los intentos de la Cámara de Representantes de investigar el caso del Gobernador terminaron en denuncias estridentes en medios de prensa sobre el uso de abogados caros por parte de ese cuerpo legislativo para impulsar la discusión del caso colonial de Puerto Rico en foros internacionales. Por el otro lado, el ex gobernador Pedro Rosselló concedió una extensa entrevista al reportero Obed Betancourt, de El Vocero, en la que abrió fuego contra la jefatura del Partido Nuevo Progresista, le imputó alejarse de la lucha anexionista y apoyó "que la gente tome sus propias decisiones sin las influencias político -partidistas".
El único sector político que había escapado a la ronda de golpes morales era el Partido Independentista Puertorriqueño, cuyo candidato a la gobernación Edwin Irizarry Mora, seguía apareciendo en distintos foros.
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