Juan Dalmau urge a Colegio de Ingenieros a ser punta de lanza en la transición hacia el uso de energía renovable
San Juan, Puerto Rico. 14 de septiembre de 2012. - El candidato a la gobernación por el Partido Independentista Puertorriqueño (PIP), Juan Dalmau Ramírez, planteó hoy ante la Convención del Colegio de Ingenieros y Agrimensores, que uno de los mayores retos que enfrenta ese sector profesional es la participación en la transición hacia el uso de fuentes renovables de energía, más urgente que nunca ante el descontrol de los precios del petróleo y la histórica y reiterada política de la AEE de promover la dependencia de combustibles fósiles como el gas natural o el carbón, igualmente sujetos a cambios en costos y disponibilidad dictados por circunstancias foráneas, y la incineración.
"Estará en manos de ustedes el diseño y construcción de estructuras de generación de energía alterna adaptadas a nuestras necesidades energéticas, condiciones climatológicas y particularidades ambientales", indicó el líder independentista.
La propuesta principal del PIP en el tema de energía renovable es la transformación de 1,500 cuerdas, de las cerca de 3,000 ocupadas por la antigua CORCO, en un gran Parque de Generación de Energía Solar. Dalmau puntualizó la capacidad del país de transformar ese espacio en la finca de paneles fotovoltaicos más grande de América Latina y probablemente del mundo, en combinación con una fábrica de paneles que tendría un impacto multiplicador en la economía, y el establecimiento de centros de investigación en los que la academia y la industria privada colaboren en el desarrollo de la capacidad de captación, eficiencia y reducción en costos de esa tecnología.
"Puerto Rico tiene que apostar a la capacidad profesional y la experiencia de nuestros ingenieros y agrimensores, y no repetir errores del pasado, consecuencia de la mala planificación de menospreciar la infraestructura levantada aquí en procesos de desarrollo más que centenarios", señaló el también Secretario General del PIP.
El líder independentista subrayó la importancia de promover proyectos estratégicos de infraestructura, como carreteras, puentes y túneles, pero recordando que la "modernización no puede ir a contrapelo de la conservación de recursos y la protección de comunidades". Destacó que su Partido siempre ha insistido en que "la Infraestructura Verde-el aire que respiramos y el agua que tomamos, es tan importante como la infraestructura gris de las carreteras por las que transitamos". Puntualizó además que el éxito de uno de las más importantes iniciativas de infraestructura nacional, el Puerto de las Américas, depende de la eliminación de las leyes de cabotaje, y lo utilizó como ejemplo de la relación entre el poder político y el desarrollo económico.
En cuanto a lo que ha sido una preocupación reiterada del gremio, el candidato independentista propuso que en toda instancia que se exija el readiestramiento de ingenieros y agrimensores, se establezca coordinación estrecha entre el Colegio que los agrupa, la empresa privada y las tres Escuelas de Ingeniería del país.
Dalmau enfatizó que existenmúltiples elementos favorables al desarrollo de la economía puertorriqueña aún dentro de las condiciones actuales. Planteó que Puerto Rico cuenta con una infraestructura relativamente buena; una red de centros educativos que puede agilizar la preparación de los recursos humanos, que son abundantes tanto en el área de servicios como en el de producción; la localización de Puerto Rico como centro geográfico de rutas comerciales; el potencial de su mercado interno, trátese de bienes de consumo o de bienes intermedios y de capital; el potencial de producción de su tierra cultivable que no ha sido explotado y la disponibilidad de un sector financiero sumamente experimentado y diverso, con un sector cooperativo cuyos activos sobrepasan los $7,000 millones, en el cual sobresalen las cooperativas de ahorro y crédito y las cooperativas de seguro.
"Todo ésto, entre otras cosas, constituyen importantes condiciones que favorecen el desarrollo económico mediante la inversión de capital extranjero y local", subrayó Dalmau.
A lo anterior, añadió el potencial de producción de bienes y servicios que a su juicio existe en nuestras comunidades urbanas y rurales de ingresos bajos y moderados, el cual no ha recibido el apoyo necesario para su pleno desarrollo, debido a la visión prejuiciada de las administraciones de los gobiernos coloniales.
"El problema no es, pues, ausencia de recursos y de potencial de crecimiento, sino la falta de poderes y la voluntad política para ponerlos al servicio de una política coherente de desarrollo industrial, agrícola, manufacturero, comercial, cooperativo y comunitario. Es necesario 'soltar amarras' para colocar los activos con que cuenta Puerto Rico al servicio de una política económica orientada en función de los intereses de nuestro pueblo", concluyó Juan Dalmau.
