A raíz de las discusiones sobre el status político de Puerto Rico que se dieron en 1989 en Washington, el Partido Independentista Puertorriqueño hizo una serie de propuestas novedosas que aclaran el camino hacia la independencia mostrando definitiavamente su viabilidad económica. Entre las medidas propuestas, el PIP propuso que las compañías foráneas que hasta el momento estaban acogidas a la sección del código de rentas internas de EEUU 936, al venir la independencia se acogieran a la sección 901 del mismo código. De esa manera, tendrían un incentivo contributivo parecido que les permitiría continuar operando en Puerto Rico mientras el país acometía la tarea de estructurar todo el andamiaje productivo que le permitiera crear condiciones superiores para mejorar la competitividad de los negocios establecidos aquí.
Hay que destacar que tanto la sección 936 y la 901 son leyes de EEUU, no de Puerto Rico, cuya aplicación significa un atractivo indirecto para quienes establezcan operaciones en la Isla. Esas leyes están sujetas a cambios por la autoridad y el poder de EEUU. La sección 936 fue eliminada por el Congreso de EEUU y su aplicación en Puerto Rico cesó a fines de 2007.
El PPD se opuso a las propuestas del PIP alegando falsamente que no eran posibles porque el código 901 aplicaba a compañías que se establecieran en el extranjero... y Puerto Rico, según la interpretación del liderato del PPD. no es extranjero bajo el sistema jurídico federal. Por el otro lado, el PNP también se opuso porque dicho arreglo de incentivo económico a empresas norteamericanas no es compatible con la estadidad. De Puerto Rico convertirse en un estado, según la alegada aspiración de ese partido la 901 dejaría de aplicar.
Hoy, los Populares dicen estar preocupados porque el presidente Obama ha propuesto poner a pagar contribuciones sobre ingresos a las compañías CFC, o lo que equivaldría a eliminar la sección 901 que, luego de que el gobierno de EEUU eliminara las 936, pasó a ser el incentivo principal para las industrias estadounidenses establecidas en Puerto Rico. Ahora el PNP también muestra preocupación, según lo demuestra el artículo de El Nuevo Día que copiamos más abajo.
Por décadas el PIP viene alertando acerca de que Puerto Rico depende casi exclusivamente de incentivos contributivos para atraer inversión extranjera. Ha expuesto que se establezca una manera distinta de incentivar que no esté basada en reducciónes o créditos contributivos. El PIP ha puesto énfasis en que la condición de subordinación política nuestra nos hace depender de EEEUU y que la aplicación de las leyes aprobadas allá interfieren con los mejores intereses de Puerto Rico.
Vemos cómo durante más de un siglo de coloniaje bajo EEUU y más de 50 años de haberse implantado el Estado Libre Asociado, todavía Puerto Rico sigue sujeto a la legislación del Congreso norteamericano que aplica en la Isla automáticamente. Las administraciones del PPD y del PNP ni han podido, ni han procurado que dicha intervención extraña, inconveniente y adversa sea eliminada, sino todo lo contrario. Como resultado, seguimos a merced del gobierno de otro país que atendiendo sus propias necesidades e intereses, tiene el poder para de un plumazo eliminar el único incentivo que existe para que las corporaciones industriales que aún no se han ido de la Isla permanezcan aquí. Es entonces que vemos cómo tanto el PPD, como el PNP se acercan el uno al otro y hacen causa común a favor de sostener el status de dependencia y subordinación actual.
Queda demostrada una vez más la necesidad de que dejemos de ser una colonia a merced de lo que ocurra o deje de ocurrir en la metrópoli y que Puerto Rico sea quien tome las riendas de su propio destino alcanzando su soberanía e independencia.
José R. Bas
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A continuación una porción de un artículo escrito por el Lcdo. Carlos Frontera que está publicado en el Portal del PIP. Los invitamos a ver la versión completa en la siguiente dirección para ver el contexto en que se propuso aprovechar la existencia de la 901:
http://www.independencia.net/topicos/econo3.html
ASPECTOS PRINCIPALES DEL PROGRAMA ECONOMICO DEL PIP
Y SÍNTESIS DE LA LEGISLACIÓN PRESENTADA
por Lcdo. Carlos Frontera Santana
Asesor Económico y Legal del Senador Fernando Martín
[...]
PROGRAMA DEL PIP
A largo plazo la soberanía es indispensable para ejecutar las medidas legislativas que puedan lograr el abaratamiento relativo de los costos de los factores productivos que permitan hacer atractiva la inversión en Puerto Rico. También es necesaria para la negociación de los acuerdos bilaterales y multilaterales sobre el comercio y el pago de contribuciones que permita el desarrollo de sectores específicos de nuestra economía de manera que podamos alcanzar unos niveles de crecimiento sustentables.
A corto plazo, el no ser estado de la unión norteamericana nos permite aprovecharnos de la Sección 901 del Código de Rentas Internas Federal para atraer inversión norteamericana a Puerto Rico. En la práctica muchas empresas que antes se acogían a la sección 936 se acogen a la sección 901 y deducen de sus beneficios en Puerto Rico las contribuciones que pagan en sus operaciones fuera de los Estados Unidos. Pero para Puerto Rico derivar un beneficio tiene que imponer contribuciones, cobrárselas y devolverlas parcialmente de manera que no se pueda establecer que la empresa contribuyente esté recibiendo un subsidio por la contribución que se paga. Para ello es necesario crear por ley un sistema de incentivos a ser financiado por las contribuciones que paguen las empresas acogidas a la Sección 901 pero del que se pueda beneficiar cualquier empresa porque:
1. Va a poder utilizar la infraestructura de transportación o energía a un costo menor.
2. Va a recibir adiestramiento para sus empleados.
3. Va a poder desarrollar a un costo menor nuevas técnicas de producción, organización y mercadeo.
4. Va poder estimular la productividad de sus empleados.
5. Va a obtener a un costo menor equipos y sistemas que protejan mejor el medioambiente.
6. Será estimulado a estrechar sus enlaces con el mercado nacional mediante la compra de materias primas o semielaboradas y la venta de sus productos finales.
7. Será estimulado a exportar tanto a los Estados Unidos como a otros mercados.
[...]
ENDI.COM - San Juan, Puerto Rico, Sabado, 23 de Mayo de 2009
Pierluisi defiende las CFC
Aun cuando no van a tono con la filosofía estadista
Por José A. Delgado / jdelgado@elnuevodía.com WASHINGTON – El comisionado residente Pedro Pierluisi aseguró que el gobierno del Partido Nuevo Progresista (PNP) defenderá la continuación, bajo el actual status político de Puerto Rico, de los beneficios contributivos de las Corporaciones de Control Foráneo (CFC).
Esto aunque se trate de una estructura tributaria que a la larga estará en conflicto con la estadidad.
Al sistema contributivo federal de las CFCs, que les permite reinvertir sus ganancias en el extranjero y no pagar contribuciones hasta que repatrian esos fondos, están ahora acogidas la abrumadora mayoría de las compañías manufactureras estadounidenses que hacen negocios en la Isla.
Pero, el presidente Barack Obama, en momentos en que están pendientes en el Congreso por lo menos tres proyectos de ley que enmendarían el sistema de las CFC, ha indicado que revisará los beneficios que reciben esas corporaciones, sobre todo para combatir la existencia de "paraísos fiscales" en el extranjero.
"En las circunstancias en que está Puerto Rico actualmente, que no me agradan en términos del status, no tengo objeción al concepto de las CFC. Al revés, creo que cualquier medida que sea conducente a desarrollar la economía de Puerto Rico es positiva", dijo Pierluisi, comisionado residente en Washington. Los ex gobernadores Aníbal Acevedo Vilá y Rafael Hernández Colón, por separado, han expresado preocupación de que ante los cambios en el sistema contributivo de las CFC que puede impulsar el gobierno de Barack Obama, la administración de Luis Fortuño no defienda con suficiente fuerza esos beneficios.
"A largo plazo no tengo dudas de que lo que más le conviene a Puerto Rico es la estadidad. Pero, como la estadidad no va ocurrir de una noche a otra, porque se necesitaría un período de transición -que tomaría años-, en el ínterin hay que sacarle el mayor provecho a lo que se tiene. Una tercera parte del producto interno bruto de la isla proviene de esas empresas y tengo que pensar en el bienestar general de nuestro pueblo", sostuvo Pierluisi.
