martes, 30 de octubre de 2007

Agenda para la Isla-Ciudad lucha en frentes múltiples

Jesús Dávila


SAN JUAN/Corresponsal EDLP — La destrucción en el sur de Puerto Rico de parte de un yacimiento arqueológico que el propio Gobierno ha certificado es de importancia para todo el Caribe y que ha levantado voces de alarma entre los arqueólogos, es apenas uno de los frentes donde se lucha la agenda de convertir esta nación en una isla-ciudad como Singapur.

Hasta el momento, hay reclamos por la destrucción de yacimientos arqueológicos en la ciudad sureña de Ponce, la ciudad de Arecibo en la costa norte y en la misma entrada de la isleta de San Juan, mientras que siguen activos los diferendos por la construcción de proyectos habitacionales en muchos puntos de la costa noreste, así como los desahucios de barriadas pobres en diversos puntos del país.

Ni siquiera se ha logrado consenso para la aprobación del postergado plan nacional de uso de terrenos, mientras los choques entre desarrolladores y defensores del ambiente han llegado a la violencia en algunas ocasiones. Hasta la presentación de un primer borrador del documento levantó una tormenta cuando el mismo evidenció cómo se pretendía dar autorización para urbanizar diversas zonas consideradas sensitivas por su valor para la protección ecológica y agrícola.

El drama se agrava con el hecho de que muchos de los proyectos habitacionales que se impulsan son para una clientela de clases altas o medias altas en un país en el que de cuatro millones de habitantes en el territorio, más del 70 por ciento de las familias no alcanzan a la mediana del ingreso.

Grupos como "Amigos del Mar" y el activista ambiental Alberto de Jesús –Tito Kayak- han sido protagonistas de muchos incidentes, pero no hay mayor coordinación entre los grupos comunales, cívicos o políticos que enfrentan la agenda desarrollista. A esos se suma la Iglesia Católica, que ha comenzado a desarrollar una "Alianza" para tratar de reunir a todos los grupos impulsada por las conclusiones sobre la defensa del ambiente elaboradas por la reciente reunión de la Conferencia del Episcopado Latinoamericano (CELAM) en Aparecida, Brasil.

En el otro lado están diversos sectores empresariales que hacen todo lo que pueden por acelerar el paso y transformar esta nación isleña del noreste del Caribe en una mega ciudad. Además, en la institucionalidad del Estado hay diversidad de opiniones, desde los que defienden abiertamente el concepto "isla-ciudad" hasta los que advierten que se podría estar provocando un desastre ecológico y social de grandes magnitudes.